Los libros no me sirven de nada hasta que yo no me he clarificado la cuestión en una elaboración personal. (Edith Stein)
Me parecía que una idea que se proyectaba en tan variados planos se refractaba enormemente multicolor y mi esfuerzo atormentado se dirigía a alcanzar una
visión unitaria y firme para poder, desde ella, entender globalmente todas sus
aplicaciones explanadas. Por vez primera encontré aquí lo que habría de experimentar
siempre en mis posteriores trabajos: los libros no me sirven de nada hasta que
yo no me he clarificado la cuestión en una elaboración personal.
Edith Stein, Estrellas amarillas, Editorial de espiritualidad, Madrid, 2006.
Psch. A pesar de mi admiración por Edith Stein, no comparto su afirmación de que "los libros no me sirven de nada hasta que yo no me he clarificado la cuestión en una elaboración personal".
ResponderEliminarNo dudo que a ella le pasase eso, pero no lo considero una situación extrapolable a todos. Los libros, sirven, al menos, como oportunidades para conocer puntos de vista ajenos al propio, lo cual es maravilloso, y utilísimo. Poder disponer de una herramienta que que te permita "ver con los ojos de otro" es... ¡mágico! No adquieren su valor por "mi" asimilación del contenido.
Yo creo que ahí no está negando que los libros sirvan como oportunidades para conocer otros puntos de vista. Creo que está describiendo un proceso, quizá incluso obsesivo, para entender el alcance y limitaciones de las ideas que se plasman en un texto, a partir de su raíz o germen. Creo que ella considera que entiende un concepto cuando acude a él de un estudio "genealógico" de sus implicaciones.
EliminarLo siento, cometí una errata. Debería haber dicho:
Eliminar*[...] cuando acude a él a través del estudio "genealógico" de sus implicaciones.